En obra

Están pintando la casa. No se si todas las mamás del mundo sufran de lo mismo. Un día como cualquier otro, se levantan, desayunan, y de repente anuncian que quieren cambiar algunacosa, la posición de los muebles de la sala, o los del cuarto. Es entonces cuando dos hijos pacientes y su padre se disponen a seguir las instrucciones de la señora madre y esposa, sudan una mañana entera cambiando y volviendo a cambiar de sitio los muebles del cuarto escogido.

Pues bien, mi mamá la agarró contra las paredes, y como es imposible cambiarlas pues es mejor disfrazarlas. Ha sido hasta interesante esto de la pintada. Al principio me iba jodiendo la rinitis, después me acostumbré y ya me vale cinco estornudar todo el día y hablar por la nariz. Creo que algo tienen que ver los divertidos vapores de la pintura. Esta semana hemos estado efusivos unos con otros: "essss que usssssted essss como mi hermano" le dije un día a mi hermano, mientras me tropezaba tratando de abrazarlo. A mis padres les ha cogido una risita sospechosa todo el tiempo. Y lo más curioso es la fascinación que sobre todos ejercen las nuevas paredes de la sala. No se como se llama la técnica pero quedan lisas y con cierto brillo, noto que cada día pasamos más tiempo tocando las benditas paredes.
Creí que iba a ser incómodo.... y sí lo es, solo que el olorcito a pintura nos tiene felices.

PS: Divine thing. Soup Dragon.